Fran y Ana acaban de mudarse a vivir juntos y se encuentran con las dificultades habituales de cualquier joven pareja que está empezando: la convivencia, las manías personales, los celos... Sólo que en su caso, hay que añadirle un pequeño detalle: Ana está muerta y es en realidad un fantasma. Además, no es el único en la casa....